02 May Marzo: Aumento del 13,8% en la demanda global de transporte aéreo
La demanda mundial de vuelos comerciales experimentó en marzo un aumento del 13,8% respecto al mismo mes de 2023, un dato que se prevé continúe en la temporada alta de verano del hemisferio norte, indicó este miércoles la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés).
Según los datos mensuales de la asociación de aerolíneas, la demanda de vuelos internacionales creció un 18,9 % respecto a marzo de 2023, mientras que los nacionales subieron sólo un 6,6 %.
Por regiones, la demanda de marzo en Asia Pacífico aumentó un 38,5 %, y lo hizo de forma más modesta, pero con doble dígito, en otros mercados: un 19,7 % en Latinoamérica, un 14,5 % en Norteamérica, un 11,6 % en Europa o un 10,8 % en Oriente Medio, por ejemplo.
En concreto, la IATA resaltó que las principales rutas desde Asia Pacífico muestran una tasa de crecimiento interanual “excepcional”, aunque recordó que el número de servicios aéreos regulares de China a Norteamérica sigue estando sólo en un 16,5 % de los niveles prepandémicos.
Por otro lado, la demanda en los grandes mercados domésticos aumentó a un ritmo más lento en marzo, siendo China donde aumentó en mayor medida, un 17,6 %.
Mientras, otros mercados domésticos mostraron un crecimiento más moderado, como India con un 3,8 %, Japón con un 3,3 % o Estados Unidos con un 2,6 %.
“Es fundamental que tengamos la capacidad de satisfacer esta demanda y garantizar una experiencia de viaje sin complicaciones a los pasajeros”, analizó el director general de la IATA, Willie Walsh.
Ante este crecimiento del transporte aéreo, el máximo responsable de la asociación de aerolíneas pidió resolver “urgentemente” los problemas en la cadena de suministro para asegurar que los aeropuertos y la gestión del tráfico aéreo cuenten con todo su personal y funcionen “con la máxima eficiencia”.
“Si bien las aerolíneas están preparadas para la atención al cliente y la asistencia cuando surgen problemas operativos, están hartas de soportar el coste cuando los retrasos y las cancelaciones son el resultado de una mala preparación en otras fases de la cadena de suministro”, aseguró.